¡Hola a todos!
Yo antes era medio runner, lo dejé una temporada y volví… y lo volví a dejar. Quizás algún día, cuando la situación lo permita, vuelva. No me he vuelto loca no, es que el tema del running tiene su punto de protagonismo en esta entrada.
Ayer por fin vi cómo el día amanecía soleado (por suerte hoy también, ya sabéis lo importante que era para mí) y como tenía que salir a hacer unas gestiones personales aproveché y me llevé a la pequeña Zoe, mi primera JSW Dolls, conmigo.
Como uno no sabe qué ponerse cuando el termómetro sube y baja de esta manera, Zoe salió abrigada de casa y luego tuvo que ir quitándose capas.
La anécdota del día, como decía, vino de una pareja de runners (tampoco esperéis gran cosa, ¿eh? jaja). Resulta que Zoe perdió sus gafas de sol, una de las preferidas de mis chicas, ¡y ninguna nos dimos cuenta! Menos mal que la pareja de runners con quienes nos cruzamos volvieron al rato corriendo para preguntarme, con una naturalidad asombrosa, «perdona, creo que esto es tuyo». Le dije que sí y que gracias sin perder mi cara de sorprendida. Vale que llevaba a la muñeca en la mano, pero la llevaba casi escondida (supongo que así solo consigo que se fijen más). Sin palabras. Gracias, seáis quien seáis y aunque no me leáis.
Como veis las fotos son pocas y es que hacía sol pero una no estaba del todo inspirada. Aún así, espero que las hayáis disfrutado.
Rebeca
Una Vitrina Llena de Tesoros