¡Hola a todos!
Perdonad que haya tardado tanto en escribir esta entrada pero llevo unos días flojilla de salud y, la verdad, no me he sentido con fuerzas a pasar por aquí y menos para escribir este post tan ‘complicado’. Dicho esto, como ya sabéis los que me seguís a través de las redes sociales, el pasado fin de semana tenía un viaje planeado que coincidía con la Webinar, el famoso evento en el que Integrity Toys presentaba algunas de sus muñecas, y que me impedía disfrutar de él como el año pasado.
Admito que durante unos días pensé que sería viable verlo a través del móvil pero pronto me di cuenta de que me sería del todo imposible. Lo que sí se mantuvo este año fueron los nervios. Me encontraba en Cantabria y ese sábado tocaba dirigirse a Asturias y, por segundo año consecutivo me levanté pensando en la Webinar y toda la tarde me mantuve pendiente del reloj. Cuando dieron las 6 mi amiga Leticia empezó a compartir imágenes conmigo, sin duda fue muy especial vivirlo así con ella, comentarlo en directo. Para mi fue lo mejor. A mitad del evento me quedé sin batería (pensaba que no podía pasar nada peor, pero sí) pero, por suerte, mi novio me dejó la suya para, muy a su pesar, continuar pendiente del teléfono y no de él jeje.
La primera en aparecer fue Katy Keene, después las ‘grandotas’, después Poppy Parker y, por último y por suerte, las Fashion Royalty. Digo por suerte porque todas las anteriores me dejaron bastante ‘fría’. Sí, Poppy también aunque en algo me olía por la temática jeje. Sin duda alguna, para mí las mejores de la Webinar, por su ropa y complementos más que nada, fueron las FR.
Sin embargo, nada fue tan decepcionante como lo que vino después (prometo a los nuevos que otros años no ha sido así, ¡no os engañé!). Comprar las muñecas fue una verdadera Odisea. Ese puntito ‘bueno’ de nervios y estrés a la hora de comprar las muñecas se transformó en horribles sentimientos: frustración y desilusión. Los que lo vivisteis como yo sabéis bien de lo que hablo. Por suerte, como ya se ha enfriado la situación seré muy light.
«Fue un cachondeo», así podría describirse cómo se vivieron los días después del evento. Aunque sé que se repitió en otras tiendas hablaré únicamente de mi experiencia. Yo suelo comprar en una tienda americana y en una europea y fue bastante bochornoso su actuación como dealers oficiales. ¿Listos?
1. Para empezar el hecho de que finalmente hasta el lunes ninguna de las dos tiendas empezasen a vender cuando otras llevaban ya dos días provocaba ansiedad. ¿Por qué? Porque las muñecas se iban agotando. (Una lo intentó el domingo pero pasó lo que se detalla más adelante en el punto tres para la otra no se me ocurre ninguna excusa válida.)
2. De hecho, en una de las tiendas en el momento en que se inició la venta ya había muñecas agotadas. ¿Cómo es esto posible? Me hace pensar que hay socios de primera y de segunda. Sí, estoy hablando de la ‘reserva por detrás’.
3. Los servidores no aguantaron y ambas tiendas fueron incapaces de dar un servicio adecuado. Mientras algunos tardamos varias horas para conseguir realizar el pedido porque la página ‘se caía’ otros se quedaron sin sus muñecas porque, a pesar de estar horas delante del ordenador intentándolo, se iban agotando.
Con todo esto que quiero decir, que la experiencia fue insoportable. Si fuera nuevo no querría repetirla, no la ‘vendería’ tan bien como lo hice el año pasado. Sin embargo, estoy convencida de que el año que viene volverá a ser estupenda la experiencia.
Después de este rollo, que no sé si a muchos os interesará, os cuento que a pesar de todo (qué poca fuerza de voluntad tengo) reservé cuatro muñecas. ¡Aquí van las elegidas!
Prometo que el próximo post será mucho más positivo jeje.
Rebeca
Imágenes vía Integrity Toys
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